viernes, 8 de junio de 2007

Inocencia


El silencio cubre tu rostro,
se divisa en tus labios un beso…
prohibido… deseado,
se escucha un lamento…
amores perdidos, arrepentimientos.

Como inocente camina el placer
un amor lejano con fuego a piel,
muerde los labios de la traición
en trizas un trozo de tu corazón.

¡El deseo no es amor!
grita un sentimiento en su interior…
¡no cubres heridas con pasión!
la experiencia mata la inocencia…
¡pero es inocente aún!!

Caricias sin pasión seducen su dolor
¡bésame!… borra mi temor…
¡tócame!… imaginadme tu amor…
¡ámame!… hazme el amor…

El miedo brilla en sus ojos
¡la desea!… cubre su rostro…
la envenena… ¡placer!
Suda el aliento… ¡la besa!
inmola… su doncellez.


Ananda

22 de Marzo, 2007

martes, 5 de junio de 2007

Delirio


Oigo tu piel… mientras te aguardo… al ocaso…
Para estar solos entre tus besos y mis delirios…
Entre la luna y el sol… inquieta a tu llegada…
Sentir tu perfume… caer de las estrellas…
Posarse en mi cuerpo.
Oigo tus ojos… como oigo cantar el mar…
Aprecio las aves mientras emergen al cielo azul…
Y no cabe el corazón en mi pecho… de placidez…

¡Mis quimeras!... no… ¡¿Dónde están?!!...
se han ido… ¡impávidas!... ¡insensibles!...
a mi llanto sensato, perturbado, excitado…
por tu ausencia… ¡no!... tú no te has marchado…
aún tú estás aquí… a mi lado…
no te incitas a marchar… no te dejaré…

¿Por qué?... ¿por qué no te mueves?
donde estás… ¡no siento tu candor!...
ese candor de vida… no, no, ¡no!!...

Existes… eso lo sé… no me cabe duda…
No eres parte de mis ridículas e insensatas utopías…
Ellas… ¿qué te han dicho al marchar?...

No me digas… han dicho cuánto te amo…
que no puedo sin ti… que vivo por ti…
¡que no puedo dejarte!... que me he vuelto loca…

Que mis alas se hacen trizas…
¿es tanto el dolor que traigo?... si, y es por ti…
por tus besos… que aunque imagino… los siento…
¿…imagino?, pero que he dicho… si tú…
mi amado… mi piel, mis ojos… eres tan real…
que pareciese que estuvieras en mi…
pero que locura… ¿no?... que ridiculez…
tú, tan perfecto…tan… tan tú…
¡¿en mi?!... Ja, que boberías...

Entupido… mi pecho ya no puede resistir…
hasta me cuesta tomar aire… respirar…
pero… no importa… no vale la pena vivir…
si no te tengo aquí… ¡AH!, pero si aquí estás…
te toco… te siento… ¡no!... ¡no te siento!...
te has ido… ¡me has dejado… me has abandonado!

¡AH!... ¡qué es esa luz!... es que acaso…
no… no puede ser… ¡no!...
he sido yo… ¡yo me he marchado!...
pero para siempre… ya no puedo volver…
…paz, inundo mi pecho de paz…
¿qué pasa?... no puedo… no puedo respirar…
es que acaso la muerte es también absurda…
sin tu latir… sin tu candor…

¿Por qué?... tan solo dime por qué…
te has quedado…
¿no decían todos… que eras parte de la
locura de una hija de la demencia?...
¡no!... tú eras tan real… ¡eres tan real…!
como para quedarte en mi mundo…
como para no seguirme… ¡como para vivir!
¡yo quiero vivir!... ¡a tu lado!... mi perfecto…

¡Momento!... ese no era mi mundo…
yo no pertenezco ahí…
¡aquí!... aquí es donde pertenezco…
entonces… si… puedo tenerte…
aquí también… es MI mundo…
yo decido quién me acompaña…
pero… ¿y si no quieres acompañarme?...
¡qué hago!... ya sé… te espero…

Mírame… aquí… apacible… inquieta…
impávida a cualquier otro ser… te espero…
junto al lago… para que no te vayas a perder…
es largo y difícil el camino hacia acá…
así no nos molestarán… estaremos tranquilos…
entre tus besos… y mis delirios…


Ananda

24 de mayo, 2007

sábado, 2 de junio de 2007

Amanuense


Como la luz de sus ojos
en rosicler tormentoso,
se escapa en sus sueños
todo el deseo.
Que si en sus brazos
llegase a tenerle
podría ¡al fin!
en pasión mecerle.

De agua en vida
su interior lleno.
Su boca… suave…
en su dintel,
por colinas de piel,
en perfecta simetría
con su amanecer.

Sus miedos ve desvanecer,
otro amor a esclarecer.
Inunda en llanto… ¡su corazón
a encontrado al fin…!!

Él espera el atardecer
su fuego vuelve a arder.
Como la luna…
se pierde entre sus dunas,
traspasa sus fronteras
hasta estar en ella.

Hacerla sentir
estar entre sus alas
en una danza de amor,
sus dedos resbalan
de tanta miel y sudor.

Descansa en su vientre…
su virgo ya no existe.
El atardecer ha llegado
el crúor de un ósculo
la luna ha enrojecido…

¡Fue un amanuense de su piel…!!

Ananda